El manejo efectivo de una crisis
En las startups, la gestión de crisis es un desafío constante. Como Agile Coach, debes mantener la calma y liderar eficazmente.
Uno de los retos constantes dentro del mundo de las Startups es el manejo de crisis, en el momento menos pensado y por el lugar más inesperado puede detonar una crisis. Es ahí como Agile Coach que debes convertirte en un faro de calma para el resto del equipo.
En SquadMakers siempre me preguntan "¿Por qué estás tan tranquilo?" y la respuesta a ello es una sola "Tenemos que seguir adelante", a pesar de que internamente pueda estar gritando desesperadamente. Esto es porque un Agile Coach siempre debe dirigir desde la calma y no desde la impulsividad o el desespero.
Para ayudarte con eso, te explico 5 elementos que debes tener en cuenta en medio de una crisis:
1. Comunica claramente
La comunicación es esencial durante una crisis. Es importante que los miembros del equipo sepan qué está sucediendo, cuáles son los planes para manejar la situación y qué se espera de ellos. Asegúrate de que todos tengan la información necesaria para tomar decisiones informadas y actuar en consecuencia.
2. Mantén la calma
Es fácil perder la calma durante una crisis, pero como líder del equipo, debes mantener la cabeza fría y ser un modelo a seguir para los demás. Mantén una actitud positiva y tranquilizadora, y ayuda a los miembros del equipo a mantenerse enfocados y motivados.
3. Identifica y resuelve el problema
Es importante entender la causa raíz de la crisis y tomar medidas para resolverla. Si se trata de una crisis interna, como un problema de comunicación o de recursos, trabaja con el equipo para encontrar soluciones y evitar que la situación empeore. Si se trata de una crisis externa, como un desastre natural o una situación política, trabaja con los expertos en la materia para encontrar las mejores soluciones posibles.
4. Trabaja en equipo
Durante una crisis, es importante que el equipo trabaje junto para resolver el problema. Fomenta la colaboración y el trabajo en equipo, y aprovecha las fortalezas de cada miembro del equipo para encontrar soluciones efectivas. Esto también puede ayudar a mejorar la moral del equipo y a fortalecer las relaciones entre los miembros.
5. Evalúa y aprende
Una vez que la crisis haya sido resuelta, es importante hacer una evaluación detallada de lo sucedido. Analiza la situación para determinar qué se hizo bien y qué se podría haber hecho mejor. Utiliza esta información para crear un plan de acción para futuras crisis y para mejorar la preparación y la capacidad de respuesta del equipo.